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La piel del miedo

Entrevista a Javier Vásconez

Por: Milagros Aguirre

Vásconez inventa una ciudad, la insinúa. La imagi-
na y la construye constantemente, en todas sus no- M.A.: La novela ha sido recibida muy bien en
velas aparece una calle, un hotel, un referente de esa Colombia y en España. La primera edición ya está ago-
ciudad que ha dicho que ama y odia. tada. La piel del miedo, de alguna manera, ¿lo consa-
M.A.: ¿Se considera un cronista de la ciudad? ¿O es la gra?, ¿Cierra con ella la construcción de esa ciudad
ciudad un pretexto para la literatura? imaginada?

J.V.: No me llama la atención el costumbrismo, J.V.: El éxito no tiene nada que ver con la lite-
me aburre. Tampoco he intentado convertirme en cro- ratura. Llevo escribiendo desde los 17 años. Por una
nista oficial de la ciudad de Quito, para eso hay otros vez creo que me están leyendo en distintos lugares a
escritores más meticulosos y pacientes. Más conven- la vez… En España, Colombia, Ecuador. Me sorprende
cionales. Lo mío es inventar la ciudad, recrearla, cons- que esto haya ocurrido. Los escritores nos pasamos la
truirla a través de mi imaginación, de mis sueños. Toda vida esperando a Godot. Pero Godot no es Dios, sino el
mi vida he querido vincular este páramo con otras ciu- editor que sacará tu libro adelante. A lo mejor accioné
dades y con otras escrituras. Si no hay desafío, no hay esta vez el interruptor preciso, no lo sé. Pero no creo
literatura. que sea únicamente a causa de esta novela… Porque
ha sido un largo proceso que se inició con El viajero
de Praga y La sombra del apostador. A los veinte años
M.A.: Su última novela es, digamos, una no- quise escribir esta novela. Imposible. No estaba prepa-
vela del miedo. Y a la vez es una de sus novelas más rado. No recibía la señal para lograr el tono requerido,
íntimas, donde se siente más la presencia del narrador la voz que me impulsara a contar la historia. Con La
como protagonista. ¿Lo siente así? ¿No es una novela piel del miedo no cierro nada. Al contrario, abro mu-
donde el autor confiesa, a través del narrador, que hay chas posibilidades…
que convivir con los miedos?
M.A.: Ud. es de los pocos autores que viven
J.V.: Esta novela es un catálogo del miedo, ba- de la literatura. De alguna manera, siempre al filo de la
sado en una experiencia humana íntima, irrepetible. Es navaja. ¿Los pros y contras de ese estar de lleno en la
la experiencia de la epilepsia filtrada por el lienzo de literatura, por y para la creación?
la escritura, es decir, de la literatura, de la ficción. Sin
embargo, el miedo es el bastidor principal que sostie- J.V.: No vivo de la literatura, sino para la litera-
ne la novela. Desde Shakespeare hasta Kafka, el tema tura. Y como soy bastante torpe para escribir, no con-
del miedo es una constante en la literatura. Pero entre cibo la literatura si no es a tiempo completo. Admiro
Jorge y yo, curiosamente, hay más diferencias que si- a los escritores que combinan este oficio con otras
militudes. tareas. La literatura no es “una carrera”, sino la lenta
búsqueda de la perfección en un oficio. También soy
M.A.: Le acompaña todavía el doctor Kronz? editor. He editado muchos libros, pero no me consi-
Es Kronz parte también del miedo? dero un editor afortunado. En cambio, tuve la suerte
de haber heredado un montón de “cachivaches” (mi
J.V.: El doctor Kronz es, sin duda, uno de mis amigo Iván Cruz las llama antigüedades: documentos,
personajes más activos. Ahora vuelve a participar, de lámparas, muebles, espejos, cuadros, etc.), de las que
forma decisiva, en La piel del miedo cuando aparece me he ido desprendiendo poco a poco hasta convertir-
en el Hotel Dos Mundos. A su manera es un hombre las finalmente en las palabras que están ahora en mis
osado, y como todo hombre osado sabe perfectamen- libros. Creo que fue una apuesta arriesgada.
te lo que es el miedo. ¿Y quién no?
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