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goo.gl/JgfDPv Adela Cortina
PERFIL
y la “ética mínima”

Fausto Segovia Baus / faustosegovia@cablemodem.com.ec

En su obra Ética mínima, la filósofa española Adela Cortina reflexiona sobre
este tema tan actual como complejo —la ética— que debe ser materia
no solo de estudio sino de práctica en la cotidianidad. ¿Es que hemos
‘domesticado’ a la ética? Aportes de Cortina.

FAUSTO Se dice que la ética no está en crisis sino la práctica de la ética. Pero ese no
SEGOVIA BAUS es el problema de fondo: lo que preocupa es que el mundo gira —para
ateos, cristianos o agnósticos— hacia un relativismo moral o anarquismo
Magíster en ético, donde los referentes ya no existen o no se practican.
Investigación y
Docencia de la Ética civil
Comunicación. Editor y
autor de publicaciones Este supuesto “decaimiento” de los valores que antes se consideraban
académicas, inmutables es el resultado de cambios planetarios que son imperceptibles
periodísticas y e impactan progresivamente en los hábitos y comportamientos en todos los
literarias. Ha sido escenarios de la vida humana.
subsecretario y
ministro de Educación, En ese sentido, la importancia de la ética rebasó las fronteras del currículo
Cultura y Deportes. o del marco de la escuela, la familia y los conventos. O como una cuestión
exclusiva de los profesores de filosofía o de los sacerdotes. La ética tiene ahora
una fachada y un contenido diferente, y a veces divergente de los cánones o
normas instaladas otrora por los dogmas. Está naciendo una ética civil como
una sólida propuesta desde los sujetos y no desde la autoridad religiosa, que
luce envejecida y, en ocasiones, de espaldas a los tiempos.

¿Qué es la ética?

Es una rama de la filosofía, que estudia las cosas por sus causas (universal
y necesario) y el comportamiento humano. También es conocida como una
disciplina que se relaciona con la moral y las costumbres de una sociedad. Se
habla de “ethos”, es decir, de un contenido cultural que marca la identidad y la
diversidad de los pueblos y naciones: su ser y modo de ser.

Para Aristóteles, la ética tiene un objetivo central: la búsqueda de la felicidad.
Epicuro, en cambio, sostenía: “Comamos y bebamos que mañana moriremos”.
De todos modos, para los griegos lo más importante era la vida intelectual,
antes que la entrega a los placeres y la riqueza, “lo que no excluye el goce
moderado de los placeres sensibles y de los bienes en general, siempre y
cuando no impida la contemplación de la verdad”. De ahí nace en Aristóteles el
concepto de virtud, que consiste en la justa medida, para lo cual es necesaria
la prudencia. Por eso, la virtud más elevada es la justicia.

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